RAYMOND QUENEAU
era un diez
pero en eso era una ese
era una ese ese ése que hasta en eso era
un 10
un diez que no era un quince sino un diez
un ése que llegaba sin llegar a 1
o como ese botón que encima le faltaba
o como un autobús
un colectivo
en el que viaja un hombre que se espera
sentado si en su asiento
parado en la parada
como un botón tampoco desprendido
sino que simplemente
le falta y le hace falta
para que no se note que le falta
y entonces qué más da
cuánto le debe a la vida todavía
tan sentado y tan solo
y siempre en ese asiento
y siempre en esa esquina
donde se espera y sin embargo sube
al bus puntual que llega o que no llega
y entonces da lo mismo
ser un ese
o un ése
o una ese
o un tranvía
que ya no pasa
porque él es ella
ese asiento vacío
ese viaje cualquiera
29-11-2021
constantino mpolás andreadis
